El proyecto norteamericano BRAIN y el europeo Human Brain Project nos darán las claves para entender el cerebro en los próximos diez años y avanzar en el tratamiento de enfermedades, así como en nuevos desarrollos computacionales
El Presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, anunció ayer el apoyo de la Casa Blanca al proyecto BRAIN, para construir el mapa del cerebro, coliderado por el científico español Rafael Yuste, profesor de la Universidad de Columbia en Nueva York. Esta megainiciativa científica contará con el respaldo de 100 millones de dólares del presupuesto norteamericano.
Contrasta el proyecto estadounidense con otra iniciativa neurocientífica, la liderada por la Unión Europea a través del Human Brain Project , dotado con mil millones de euros para los próximos diez años, que también busca construir un mapa del cerebro a través de la modelización matemática y computacional.
¿Qué similitudes y diferencias hay entre ambas iniciativas? ¿Estamos ante la próxima "carrera espacial" trasladada al campo de las neurociencias? Estos dos proyectos sin duda nos darán las claves sobre qué sabremos de este órgano en la próxima década, ayudándonos a tener un mapa del cerebro completo en estos diez años.
La apuesta de Obama por el cerebro
El madrileño Rafael Yuste fue nombrado por la prestigiosa revista Nature en 2012 como uno de los científicos más prometedores de los próximos años. Una hipótesis que se cumplía a principios de este año, cuando el Gobierno de Obama apostaba por su innovadora iniciativa para trazar el mapa del cerebro con el proyecto BRAIN .
Actualmente solo podemos conocer la actividad cerebral a través de técnicas como la exploración PET o la resonancia magnética (MRI), ampliamente usadas en medicina. Sin embargo, la idea de Yuste trata de mapear cada neurona para así tener la "película completa" de nuestro cerebro, una iniciativa gigantesca que sin duda nos ayudará a profundizar en nuestro conocimiento en neurociencias, y a mejorar el tratamiento y diagnóstico de enfermedades neurodegenerativas.
Empresas tan importantes como Google o Microsoft han participado en la planificación de esta iniciativa que recuerda en parte al Proyecto Genoma Humano. Sin duda un esfuerzo internacional enorme para entender un poco más este órgano, que necesitará de la colaboración de equipos multidisciplinares de científicos de todo el mundo. El mapa del cerebro será construido gracias a estos cartógrafos de la neurociencia, una bella iniciativa que verá sus resultados en los próximos años.
El esfuerzo europeo para saber más acerca del cerebro
Hace dos meses la Unión Europea también lanzó su iniciativa para saber más acerca del cerebro, calificando el Human Brain Project como uno de los proyectos estrella (flagship) de investigación a nivel europeo.
La idea, propuesta por Henry Makram, de la Escuela Politécnica Federal de Lausanne (Suiza), y apoyada por otro investigador español de renombre, Javier de Felipe, se basa en un consorcio anterior, el Blue Brain Project.
La iniciativa europea, a diferencia de la norteamericana, no busca mapear el cerebro de forma real, sino modelizarlo y simular su funcionamiento en un ordenador. La construcción de un modelo por ordenador del cerebro permitiría unificar todas los resultados existentes hasta ahora, lo que provocaría grandes avances en investigación básica y aplicada. Entender el cerebro mediante su modelización ayudaría también en el diagnóstico y tratamiento futuro de las enfermedades neurodegenerativas. Una iniciativa colosal, que también cuenta con multinacionales como IBM, además de otras ochenta entidades académicas y empresariales, para trazar el mapa del cerebro a nivel virtual mediante su modelización matemática y computacional.
El Human Brain Project también repercutirá en avances importantes en la computación. La modelización supondrá trasvasar todo el conocimiento actual sobre el cerebro a valores matemáticos, que a su vez serán incorporados en simulaciones a realizar en este proyecto. Así podremos imitar la efectividad y el potente rendimiento de nuestro cerebro con la creación de nuevos supercomputadores.
Dos iniciativas para entender el cerebro
Los dos proyectos, el norteamericano de Yuste y el europeo de Makram, no han de entenderse como dos polos opuestos de la investigación en neurociencias, sino como herramientas complementarias para profundizar en nuestro conocimiento de este órgano tan importante. Mediante la construcción del mapa del cerebro, podremos saber las claves de la investigación neurocientífica de la próxima década.
Mapear el conjunto de neuronas para entender su funcionamiento a nivel global, por una parte, e integrar todos los resultados de investigación a través de su modelización, permitirá sin dudas grandes avances en el campo de la neurobiología y la computación. Dos vías paralelas que en el futuro tendrán grandes repercusiones en nuestra salud, a través de un mayor conocimiento del cerebro.
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